Más allá del arbitraje el cuadro merengue aprovechó el 100 su condición de local en donde hasta el último suspiro del partido fue que los merengues amarraron su título número 36 en la liga española.
De inicio a fin el Santiago Bernabéu fue testigo de un duelo que cualquiera podía ganar, a los 5 minutos el defensa danés Andreas Christensen abrió el marcador con una jugada a balón parado, pero rápidamente los de casa responderían con un dudoso penal que cobró Vinicius.
Más tarde la poliomie arbitral sería presente en un tiro de esquina a favor del Barcelona el cual se podría ver cómo se veía que el portero Andriy Lunin entraba en su propia portería y que prácticamente puedo haber sido el segundo para los dirigidos por Xavi Hernández pero fue la video tecnología que decidió no marcarse como gol.
En el segundo tiempo el Barcelona, realmente estaba sorprendiendo y dando un recital en la también conocida ‘Casa Blanca’ y fue el canterano Fermín López quien le dio la voltereta de tal marcador silenciando por sus momentos el ambiente madridista.
En la recta final del partido, los dirigidos por Carlo Ancelotti reaccionaron, y Lucas Vázquez emparejó la pizarra, pero como cuando todo parecía terminar el empate el inglés Jude Bellingham puso la cereza del pastel a una remontada de ensueño para el Madrid.
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